Clases Sabatinas





Carlos Cueva un Colegio Ejemplar

 
Los colegios nocturnos no pueden cumplir las 40 horas a la semana y deben ajustarlas con clase los sábados. Sin embargo, en los planteles como el colegio Carlos Cueva Tamariz se les dificulta acatar la disposición ante la falta de alumnado.
Ayer de los 500 estudiantes que asisten a este plantel educativo apenas llegaron siete. En el establecimiento estuvieron presentes todos los maestros, pero la poca presencia de estudiantes obligó a no dictar clase; pese a que los docentes permanecieron en la institución de acuerdo a la disposición ministerial.
Los cambios en el desarrollo de clases se han complicado para los colegios nocturnos, ya que los estudiantes son los que no pueden cumplir con los horarios. Muchos de los jóvenes trabajan y debido a ello de lunes a viernes no pueden ingresar puntualmente a las 18h00, menos aún estudiar los sábados en la tarde.
En los colegios deben acoplarse para acatar las leyes. En el caso del Francisco Tamariz tienen que dictar por módulos y seminarios algunas materias, con el objeto de obedecer los cambios en el bachillerato unificado.
 
Menos de la mitad de estudiantes de los diferentes colegios nocturnos asisten a clase, los sábados, para completar las 40 horas semanales.
Este ausentismo preocupa a las autoridades educativas e hizo que se pida a los administradores (rectores) de los establecimientos sus propuestas de horario que permitan cumplir las horas de clase de lunes a viernes.
“Asistir el sábado a las aulas es complicado”, sostiene Diego Morocho, estudiante del colegio Carlos Cueva, él es padre de familia y el sábado trabaja en la mañana y en la tarde, los dos últimos sábados faltó a clase al igual que decenas de estudiantes más.
La preocupación de esta situación fue tal que decidieron reunirse con los presidentes de los otros cursos para determinar que una delegación de estudiantes, sin la injerencia de maestros, se encargue de organizar todo. Morocho fue elegido con otros dos compañeros y de esa forma lograron el contacto y apoyo de los estudiantes de los colegios Febres Cordero, Israel, UNE, Ecuador, San Francisco, Octavio Cordero, Francisco Tamariz, César Dávila, Miguel Merchán y Miguel Moreno. Así se preveía exigir que se suspenda la asistencia los sábados y proponerles a las autoridades que se concluyan las clases para esta sección 15 o 20 días después de finalizado el año lectivo, con el objeto de cumplir con el total de horas establecidas en la ley.
Incluso hoy se planificaba una marcha pacífica y también el envío de una carta, escrita por ellos mismos, a la ministra de Educación, Gloria Vidal sobre las dificultades por las que están atravesando. “Se supone que el estudio nocturno es para que también podamos superarnos mientras trabajamos y nos ponen esta traba que nos obliga a decidir entre el trabajo y el estudio”, acota.
Víctor Tapia, Carlos Bone y Franklin Quinde, estudiantes, aclaran que este reclamo no era algo político, es más no querían que se los relacione con la Federación de Estudiantes Secundarios (FESE), lo “único que queremos es que reconozcan nuestro derecho a la facilidad de estudiar porque somos gente que dependemos de nuestro trabajo”, manifestaron cambios.
El anuncio de esta protesta pacífica también hizo que las autoridades aceleren en la búsqueda de soluciones.
María Eugenia Verdugo, coordinadora zonal de Educación del Austro, explicó que corroboraron el ausentismo muy alto en los colegios y eso motivó que se propongan a las autoridades de los establecimientos que presenten sus propuestas (estipulado en el mismo reglamento de Educación) de horarios que permitan cumplir con las 40 horas de clase de lunes a viernes.
Según el supervisor, Raúl Bernal, hasta el momento todas las autoridades de los planteles, de manera verbal, han dado a conocer su conformidad y solo esperan que las propuestas sean enviadas por escrito para analizarlas y posteriormente aplicarlas de manera inmediata. Uno de los horarios que podría darse es que los docentes ingresen cerca de las 14h30 y salgan pasadas las 22h30; en tanto los estudiantes reciban clase desde las 18h00 hasta 22h50.
María Eugenia Verdugo hace hincapié que al darse esta modificación también se coordinará mayor seguridad y transporte. Para ello se ha solicitado a los funcionarios correspondientes se realicen las gestiones.